La empresaria británica Michelle Mone tiene un patrimonio superior a los 25 millones de euros, y lo ha conseguido tras una dura lucha.
“Adelgazar me hizo ganar un pastón: todas las puertas se me abrieron”
El cambio de su figura y la mejora de su aspecto físico le sirvió para volver a repuntar económicamente, convirtiéndose en una figura mucho más mediática
Escuchar o leer historias de superación es algo que a todos nos gusta y que puede servirnos de gran ayuda, porque nos demuestra que hay que seguir adelante cuando nos encontremos obstáculos, que las barreras están para traspasarlas y que siempre hay que seguir adelante en este camino, a veces pedregoso, que es la vida.
Un ejemplo de ello es Michelle Mone. Esta multimillonaria británica puede considerarse como el típico caso de persona hecha a sí misma. Sin embargo, al revelar las claves de su éxito, una puede resultar chocante y, quizá, bastante superficial. Esta no es ni más ni menos que una importante bajada de peso y, por tanto, una mejora de la apariencia física.
La empresaria británica, que se calcula tiene un patrimonio superior a los 25 millones de euros, afirma en Business Insider que desde 2010 ha adelgazado unos 50 kilogramos, ha reducido en 10 tallas (inglesas) sus prendas de vestir y que ahora cada día sale a correr entre tres y ocho kilómetros.
¿Pero qué tiene que ver con el éxito?
Parece evidente que mantiene una vida mucho más saludable que la que podía llevar antes de 2010, pues mantiene una dieta equilibrada y realiza ejercicio regularmente. Sin embargo, ¿qué relación tiene con el rendimiento laboral o con el incremento de sus ingresos? Mone lo tiene claro: “Cuando yo tenía sobrepeso, me cansaba mucho más fácilmente, me sentía agotada y esto no era positivo en mi rendimiento. En cambio, cuando comencé a perder peso y a sentirme más atractiva, todo comenzó a ser más fácil, como si las puertas se abrieran. Puede parecer algo horroroso, pero esta es la verdad”.
Desde entonces. Mone ha visto cómo sus cuentas bancarias han ido aumentando paulatinamente sus ceros, y se ha convertido en un icono mediático en Reino Unido. Aparece continuamente en los medios de comunicación, en revistas como Hello, y se ha convertido en la imagen de empresas como British Airways e, incluso, en tertuliana en programas como The Agenda, llegando a compartir pantalla con el mismísimo David Cameron.
No todo fue el físico
Dicho así, puede parecer que todo el éxito de Mone viene a raíz de que mejorara su imagen. Nada más lejos de la realidad. Pese a todos los problemas que vivió durante su juventud, paso a paso fue avanzando hacia adelante hasta llegar a la cima.
Nacida en un barrio humilde de Escocia, la ahora, millonaria se vio obligada a dejar los estudios con solo quince años debido a que a su padre le diagnosticaron un problema muscular degenerativo que le dejó en sillas de ruedas y le impidió trabajar.
A tan pronta edad tuvo que ponerse manos a la obra para conseguir que entrara en casa un dinero extra. Sin embargo, todo se complicó cuando se quedó embarazada con 17 años. Pese a todo ello, con la llegada de la veintena consiguió trabajar en el área de marketing de la empresa cervecera Labatt, llegó hasta el cargo de responsable, pero fue despedida a los 24 años por recortes en la empresa. Es en este momento, es cuando se queda embarazada por segunda vez.
A partir de esta información, cualquier pensaría que no llegaría mucho más allá, pero dando vueltas a la cabeza encontró una mejora en los sujetadores femeninos. Es esta ocurrencia la que le sirvió para amasar su gran fortuna, con la creación de su marca de ropa íntima, en la que también terminó trabajando su esposo.
Todo se torció en 2010, Mone se enteró de que su marido la engañaba con una empleada de la compañía, comenzó a tener problemas con el alcohol y su empresa pasó por apuros económicos. La británica lo tuvo claro: debía expulsar a su marido de la compañía, cambiar de hábitos y no volver a cometer el error de juntar amor con negocios.
El cambio de su figura y la mejora de su aspecto físico le sirvió para volver a repuntar económicamente, convirtiéndose en una figura mucho más mediática y para mejorar la marca de su empresa. Es cierto que su riqueza la consiguió antes de cambiar de imagen, pero Mone tiene claro que gracias a ello ahora es más feliz y exitosa, lo que le permite publicar libros cuando quiere, trabajar menos y ahondar en otros negocios que la interesan.
Al fin y al cabo, y aunque a veces no queramos reconocerlo, la imagen tiene un gran importancia en todos los campos de la vida.
Fuente:
Adelgazar me hizo ganar un pastón: todas las puertas se me abrieron. Noticias de Alma, Corazón, Vida #lpu6IxKLkMBjNJ6f
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http://en.wikipedia.org/wiki/Michelle_Mone