DIATERMIA Y ….. Deporte, calor localizado para acelerar la recuperación y reducir la inflamación y el dolor
La diatermia es una técnica con una larga trayectoria de más de 30 años, que se basa en la producción de ondas de alta frecuencia que producen un aumento de temperatura en la zona lesionada.
Se trata de una terapia basada en el uso de corrientes eléctricas de alta frecuencia, con lo que se consigue estimular los tejidos en zonas muy profundas que son muy difíciles de activar. De esta forma, con la diatermia se consiguen avances notables frente a patologías o lesiones como los esguinces, las roturas fibrilares o las contracturas.
Un tratamiento basado en el empleo de corrientes eléctricas de alta frecuencia, que tienen como finalidad elevar la temperatura en determinadas zonas. Se trata de estimular el tejido en zonas profundas. En el pasado para conseguir elevar la temperatura en la zona a tratar se usaban microondas o infrarrojos, pero el campo de actuación se disipaba o penetraba muy poco.
¿La diatermia es un tratamiento doloroso?
Esta técnica tiene la ventaja de ser totalmente indolora y no estar contraindicada excepto para casos muy concretos.
Suele aplicarse en sesiones de 15 a 30 minutos.
¿Qué siente el paciente durante la aplicación?
Los pacientes tienen una sensación térmica de calor, siempre dentro de la zona de confort. Una sensación de calor que en una escala del 1 al 10 puede estar en torno a un 7.
El tratamiento con diatermia ejerce un efecto antiinflamatorio y analgésico (el efecto se produce a nivel profundo) lo que permite al especialista trabajar con otras técnicas.
¿Precauciones y contra indicaciones a la aplicación con Diatermia?
Si hay alguna herida, son contraindicaciones relativas y básicas, solo hay que tener precaución en pacientes con material de implante como marcapasos o placas en fracturas, pero solo es problemático si la diatermia se aplica en la zona del implante.
Modalidades de diatermia
Cuando se habla de diatermia, hay que partir de la distinción entre las dos modalidades de aplicación:
- La diatermia capacitiva se utiliza para los tejidos más superficiales. Suele utilizarse para trabajar la recuperación muscular.
- La diatermia resistiva permite trabajar tendón, hueso y ligamentos. Es decir, «todo lo que tenga menos capacidad hídrica que el músculo».
¿Qué efectos Obtenemos con la diatermia?
El efecto se produce a nivel profundo, aumentando el metabolismo y acelerando por tanto la recuperación.
La diatermia consigue acelerar los mecanismos naturales de reparación de los tejidos lesionados. El mecanismo es el siguiente: la aplicación de calor focalizado en tejidos profundos produce unos efectos bioquímicos de mejora de la permeabilidad de la membrana celular, así como un incremento de los intercambios iónicos, y un aumento de la microcirculación con una mayor vasodilatación. Esto produce, finalmente, la mejora de la reabsorción venosa y linfática.
La transferencia de corriente de alta frecuencia a los tejidos produce varios efectos:
- Eleva la temperatura de esos tejidos, en ocasiones a niveles muy profundos a los que no es posible llegar con otras técnicas.
- Se produce una elevación del umbral del dolor como efecto necesario de ese aumento de la temperatura.
- Tiene un efecto vasodilatador, de modo que el aumento del flujo sanguíneo facilita el drenaje de edemas.
- Se produce también un efecto antiinflamatorio, resultado directo del efecto vasodilatador.
Con la diatermia se penetra en el tejido, y se concentra o expande. Y no sólo eso, permite trabajar de forma dinámica (IN MOTION), estar haciendo una aplicación y trabajando a la vez un movimiento específico lo que aporta versatilidad a la aplicación de la Diatermia.
Con todo esto obtenemos una reducción del dolor, la mejora de la movilidad, la regeneración de los tejidos más rápidamente, se acelera la cicatrización y se reduce la fibrosis.